Yo no sé a vosotros pero a mí, desde pequeñita, siempre me habían dicho que no podía copiarme de los compañeros, que eso estaba muy mal por que era aprovecharse del trabajo de los demás. Pues bien, ahora resulta que sí que puedo, que me dan permiso para que me "copie" de un texto que me encuentre por Internet, lo mismo pasa con las fotos, libros y mira tú por donde, también con la música y el cine.
Resulta que Lawrence Lessig, junto con un grupo de expertos en derecho, crearon una organización no gubernamental llamada Creative Commons. Esta empresa se basa en la filosofía Copyleft, que consiste en hacer un uso creativo de las leyes de Propiedad Intelectual, es decir, que en vez de prohibir el uso de las obras creativas permitimos, de antemano, su utilización. Sin embargo, que una persona se aproveche de este libre comercio no quiere decir que no se tenga que adaptar a unos límites. Por eso, Creative Commons pone a disposición de los interesados varios tipos de licencias, cada una con sus características.
Y como ahora se me permite "copiar" voy a utilizar la misma foto que han encontrado mis compis Erica y María.
lunes, 10 de diciembre de 2007
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2 comentarios:
Qué curiosa la mentalidad estudiantil. ¿Copiar y usar son sinónimos? ;)
Eso es así Sergio, son dos formas diferentes para referirse y hacer una misma cosa jejeje.
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